La
feria empezó con el eco del huracán arrollador de “El Juli” el Domingo de
Resurrección, tal era la fuerza del eco, que el paso de la feria no lo ha
olvidado, lo ha engrandecido. Lástima que un derrote seco de un Victoriano del
Río le obligara a guardar cama, porque estoy seguro que si se asoma a la de
Miura, muchos de los que le criticamos por el toro que escoge para torear, nos hubiéramos
rendido ante él.
En la
feria, nombres como los de Antonio Nazaré y Manuel Escribano se apuntaron al
carro de “El Juli”. Una alegría para Sevilla y espero que para el escalafón,
aunque la poca difusión de la feria, sin tv este año, creo que no dará el
merecido sitio para la temporada para estos dos toreros.
Luque
y Fortes siguieron demostrando que valen, pero ambos, necesitan ya un triunfo legítimo
en plaza de categoría especial, para terminar
de relanzarse.
Morante
dijo toreando “Soy el Rey del Capote”, por si había alguna duda. Sevilla y Yo
necesitamos verlo otra vez por la Puerta del Príncipe. Todo se andará.
Aunque
mejor que otras veces Perera decepcionó, no por aptitud, quizá porque se apuntó
a dos tardes donde el ganado dejó mucho que desear.
El príncipe
de Sevilla, Manzanares, mantiene el trono por la compasión de su público fiel.
Decepcionó en la encerrona. Tuvo toros para seis orejas y se conformó con dos
de consolación en el último de la tarde, en una faena más jaleada que
merecedora de doble trofeo. Con un Cuvillo de orejas no apretó y con un
Victorino de moneada al aire, en lugar de apostar para demostrar que es torero
completo decidió quedarse mucho antes de la raya que marca eso, porque el toro movía
las orejas. Luego en la corrida de Victoriano del Río, cortó una oreja más merecida
pero sin ver al Manzanares rotundo.
Y “El
Cid”, pues se dejó toros de triunfo, que eso ya no es novedad. No seré cruel,
pero viene pidiendo retirada.
Javier
Castaño tuvo un lote de Miuras de Puerta del Príncipe. Una vuelta al ruedo supo
a poco. Y no quisiera olvidarme de las maneras que apunta el novillero Lama de
Góngora.
El
mano a mano de la feria resulta que no se dio, y es que las cuadrillas de
Manzanares y Castaño se lo merecen. Las dos mejores cuadrillas de toreo.
Del
toro, la feria tiene por bandera la gran corrida de toros de Miura, lidiada en
la última de feria. Dos toros espectaculares, el segundo de la tarde y el sexto
“Datilero” que fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. Sexteto de
toros de 10. Si de 10 fue la de Miura, de 9 y medio fue la corrida de
Victoriano del Río.
Torrestrellas
manejables, un bravo de Daniel Ruiz de nombre “Lechón”, un remiendo de Parladé
de nombre “Elefante”, un Victorino de nombre “Verderón” también fueron toros
destacados en la feria.
Sin
olvidar a el Cuvillo, el Victorino y el Juan Pedro de la encerrona de
Manzanares, ni a “Histérico” de Fuente-Ymbro.
Una
buena feria a la que le faltó la televisión en directo. Sevilla, plaza de categoría
especial, marco inconfundible del toreo debe tener televisión para que lo que
ocurre en ella tenga la repercusión debida. Este año muchos triunfos están
mudos por este motivo. Estoy seguro que con televisión la respuesta de público
hubiera sido igual.
Sevilla
sabe que La Maestranza, por su categoría, debe tener televisión y la imagen
mostrada hubiera sido espectacular. Seguro que esto se remedia. Sevilla lo
merece, a pesar de la empresa.
Por Fran Pérez @TodoToros
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