Septiembre
se presenta crucial para el escalafón inferior. El toro del IVA ha sido un duro
golpe para las novilladas y se le ha dado en el mes básico para los novilleros.
La subida de IVA de las novilladas,
tributadas ahora con el 21%, pone en peligro la organización de las mismas. Tan
sólo ferias de tradición y viéndoselas muy negras para poder celebrarlas y
plazas de la categoría de Madrid, van a dar este espectáculo, Pilar de la
tauromaquia.
Por
eso las ferias de Calasparra, Arnedo, Algemesí, Moralzarzal, Villaseca de la
Sagra y el ciclo de encastes minoritarios de Madrid, y algún que otro ciclo más
que se me olvida y que si lo desean pueden comentarlo abajo, se presentan interesantes.
Se tendrá
que ver cual es la respuesta de Público a estas ferias con esa lacra del IVA en
taquilla. Como me da que la cosa no va a tirar del todo bien, no podemos
quedarnos con las manos cruzadas. Este invierno debe de celebrarse el Concilio
de la Tauromaquia, que ya se convocaría con un año de retraso, para tratar de
salvar las novilladas y otros temas de vital importancia en una fiesta que anda
en la UCI. La idea del profesor Medina, tiene buena pinta, y es que si ponemos
a las novilladas como un espectáculo donde participan aficionados, quiere decirse,
desprofesionalizar las novilladas, el IVA sería del 10%, el porqué, porque los
deportes y acciones de carácter aficionado no han sido tributados al 21%.
Mientras
este mes hay que ir a las novilladas, apoyar a la cantera se antoja asunto de
estado. Por las novilladas, por la fiesta, por el futuro #Apoyoalacantera
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