CUANDO NO VIENE LA TONTA (Madrid, Crónica de la 22ª de la feria de San Isidro)

López Chaves desaprovechó un gran toro, "Corredor", 4º del festejo de hoy.

Hoy no hubo aburrimiento, y no porque la corrida de José Escolar fuera buena, fue porque los toros tuvieron emoción y no eran la tonta del bote a la que las figuras del momento nos quieren acostumbrar. Y nos quieren acostumbrar porque bajo mi modesta opinión, si se anuncian con los toros de hoy, unos no podrían con ellos, el sobrenombre de figura se esfumaría y más de uno se subiría al mástil de la bandera. Por eso todo el mérito del mundo a los toreros, que como las de hoy, son capaces de anunciarse con el verdadero toro de lidia, el fiero, el listo, el emocionante.

La corrida de José Escolar fue correosa, lista, alimañosa pero se agradece enormemente que aunque fueran malos no se agotara la emoción en el ruedo. Entre las cuadrillas de los matadores corrió el pánico, salvo en Jesús Talavan, que cuajó un buen tercio de banderillas la cuarto.

Dentro de la complicada corrida, apareció un gran toro, para callar la boca a esos que dicen que esto no embiste. El cuarto de nombre “Corredor” fue un excelente toro, para apostar, para tirar la moneda, para cortarle las dos orejas. Fue pésimamente lidiado y López Chaves ando desconfiado y sin apuesta. Ante el complicado primero tiró por la calle de en medio sin ni siquiera probarlo. Tarde mala la del salmantino.

José María Lázaro, muy poco toreado, llegó a la corrida por estar bien en el pasado verano madrileño. Su regalo fue un tercer toro, que apuntaba a bueno y que se descoordinó, en un topetazo contra las tablas. Debió ser devuelto pero el presidente lo mantuvo. Ante el Lázaro consiguió escaso lucimiento. Con el sexto tampoco lució, aunque este toro si le permitió dar tres tandas de muletazos, pero no llegó al público.

Si se calificara a los toreros por el nivel que muestran delante de la cara de los toros de diferentes encastes, Fernando Robleño seria figura. Actitud de figura de otros tiempos tuvo su tarde. Se la jugó con el segundo, un toro serio de actitud y muy complicado. Robleño sacó la casta, tiró la moneda y ganó. Mató de buena estocada y fue enormemente ovacionado. El quinto, de feas hechuras, con tipo de toro antiguo y de juego complicadísimo le puso las cosas difíciles. Mato de estocada y dejó claro que él también los tiene “g”. Y de postre, una encerrona con Escolares en Céret.

Ficha:

Plaza de Toros de Madrid, Las Ventas. Jueves 31 de mayo. 22ª de la feria de San Isidro.

Toros de José Escolar, con emoción y complicados. El 4º, fue un gran toro.

López Chaves: Silencio y Pitos

Fernando Robleño: Ovación con saludos y Silencio

José María Lázaro: Silencio y Silencio

Entrada: Tres cuartos de entrada.

Y mañana: Toros de Cuadri para: “Rafaelillo”, Javier Castaño y Luis Bolívar.