Le habré
yo dado palos a Garcigrande, muchos, y hoy también los tiene por las
presentación y juego de cinco de sus toros. No aptos para Bilbao, si no es
porque unas figuras se empeñen en matar esa ganadería, como el caso de hoy, y
de tantas tardes.
Pero
en la finca de Salamanca un toro si era
de Bilbao. “Hechicero” se sorteó en tercer lugar y homenajeo a todos los
pilotos de avión y expertos en planeo. Un toro excelente para la muleta, para
bordar el toreo que se encontró con el mejor torero, el rey de 2014, llamado
Miguel Ángel Perera.
Porque
de cada embestida ofrecida por hechicero salía un pase que redondeaba una faena
entre un toro bueno y un torero bueno. Lo mejor al natural, es mi debilidad, es
el pase rey, y se vio. Bilbao se volcó con Perera, Bilbao se enamoró de “Hechicero”.
Pero hay amores que matan. Y tanto se enamoró un sector del público de “Hechicero”
que le pidió el indulto.
La
obra ofrecida en la muleta les hizo olvidar el juego del toro en el caballo. El
presidente no se olvidó, el aficionado tampoco, por eso denegó esa petición.
Pero el torero, pasó de la grandeza del toreo a desconcentrarse con la moda
indultadora de la tauromaquia 2.0. No debió caer en la tentación porque cuando
Matías el presidente le mandó matar al toro, a él ya se la había pasado por la
cabeza que lo iba a indultar. Falló con la espada en dos ocasiones y se esfumó
el gran triunfo. A “Hechicero” le dieron la vuelta al ruedo en el arrastre y el
torero se dio una vuelta al ruedo seguro que lamentándose de querer pecar en un
templo.
Con el
sexto, soso y deslucido, se metió entre los pitones y asustó al personal. Le
pidieron las orejas, más por la obra del tercero, que por el susto del sexto.
El caso era que de orejas la faena no era. De una que le dieron tampoco. Una
ovación unánime bastaba. Pero ojo mañana, que El Rey regresa en un
enfrentamiento con Fandiño. Quites, que es lo que faltó hoy, habrá.
Juli
cortó una oreja y no me acuerdo ya porque. Creo que estuvo solvente con el
noble quinto. Una faena más de El Juli con una estocada mal ejecutada como
siempre. Con el segundo se estrelló con un toro feo y deslucido.
Ponce
le sacó faena a un flojete toro primero. Lo de este tío es de otro mundo,
lucirse con semejante mona y que lo aplaudan. Luego el cuarto, un toro más
complicado y para hacer el esfuerzo, Ponce se quedó sin pasar la raya. En otros
tiempos le hubiera formado un lio. Pero Ponce ya solo quiere las cosas fáciles.
Yo echo de menos a ese Ponce de la gotita e la nariz. Lo vi en Valencia el día
de la cornada, espero que no sea la última vez.
Ficha:
Plaza
de Toros de Bilbao. Jueves 21 de Agosto. 6ª de la Semana Grande.
Toros
de Garcigrande. De mala presencia excepto el 3º, que fue el mejor de juego,
excelente en la muleta, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. Los
otros deslucidos y sosos. 5º Noble.
Enrique
Ponce: Ovación y Silencio.
“El
Juli”: Silencio y Oreja.
Miguel
Ángel Perera: Vuelta y Oreja.
Entrada:
Más de tres cuartos de entrada.
Y
mañana: Toros de Jandilla para: Padilla, Perera y Fandiño.
1 comentario:
perera anda sobrado con todos los toros-parecía que era él el maestro.Pienso que necesitaria corridas un poco mas duras para que transmitiera más.
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