La
Corte Constitucional de Colombia ha ordenado el restablecimiento de las
corridas de toros en la Plaza La Santamaría de Bogotá, prohibidas desde junio
de 2012 por el alcalde de la ciudad, Gustavo Petro.
Según
el tribunal, las autoridades de Bogotá deberán disponer lo necesario para la
reanudación del espectáculo taurino en un plazo de seis meses y adoptar
mecanismos contractuales y administrativos que garanticen la continuidad de la
tauromaquia.
Ya en
2012 Julián López “El Juli”, Sebastián Castella, Luis Bolívar y Miguel Ángel
Perera pelearon para que el dictador alcalde no prohibiera la fiesta en la
capital colombiana, pero el fallo ha venido motivado por la pericia de un grupo
de novilleros colombianos que se han jugado la vida sin comer para que sus
ideales no fueran zarandeados por el dictatorial Petro.
Al
grito de #FuerzaNovilleros mantienen una huelga de hambre, que pretenden seguir
después de esta buena noticia, hasta que por la plaza de toros de la Santamaría
se trence el primer paseíllo después de la cacicada del alcalde. A este movimiento se les sumó la energía de
toda una figura del toreo, César Rincón que transmitió a los novilleros que no
estaban solos.
Desde
las redes sociales ese #FuerzaNovilleros con el que dábamos fuerza y apoyo a
estos valientes, hoy se ha convertido en #GraciasNovilleros por todo lo pasado.
Su valentía ha dado sus frutos, aunque la garrapata del alcalde hará todo lo
posible para no hacer caso a la Corte Constitucional.
A raíz
de esto uno mira hacía Cataluña. A lo mejor no fuimos lo suficientemente
valientes para defender nuestra verdad legal ante Partidos independentistas
Corruptos, que disfrazaron la fiesta de los toros de bandera roja y gualda. Fuera
que huele a España, nos hacemos los verdes, pagamos a un tío para que nos
disfrace el destierro de animalismo y no se entera ni Dios. Esa fue la
consigna.
Pero
nosotros si nos enteramos. Así funciona el independentismo que pide dinero a lo
que quieren desterrar.
El
fallo del Tribunal Constitucional Español está tardando mucho. Como todo lo
español, aunque una Catalana, perteneciente a él y obligada a comunicar el
fallo, este detrás de la mata y no diga ni mu.
Me
visto de optimismo e imagino un posible comunicado hoy. No deberíamos estar
contentos de haber llegado a esta situación y deberíamos tener armas para no
volver a llegar a ello. Pero una alegría al cuerpo nos hace falta. Ese cierre
nos dolió y reventó nuestra moral taurina. No caerá esa breva, pero si pasa, me
voy a bañarme a Cibeles, Neptuno, Canaletas cual Champions de futbol
conseguida.
Por
Fran Pérez
2 comentarios:
¡Zaaaas, en toda la boca! Ja,ja, ja. A ver si ahora tiene lo que hay que tener y dimite como dijo que haría...
Me parece muy bien. Los novilleros bien, Cesar Rincón bien. Pero, ¿y los toreros en activo de Bogotá?
Claro los que ya están arriba les importa un pito, pero si esto se empieza a hundir estos señores también acabaran viniendo abajo.
Un saludo.
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