Na de ná. La apuesta de Daniel Luque en Madrid le ha salido francamente mal. Ya lo dijimos en este blog. Las ganaderías elegidas para su encerrona en Madrid no eran las adecuadas. Y se ha cumplido. No se puede triunfar en Madrid con toros bobalicones de Juan Pedro Domecq y Nuñez del Cuvillo. Además, al ver que la tarde no funcionaba, Daniel se ha sumido en la tristeza y ha perdido esa frescura mostrada en los dos primeros toros. En resumen, tarde para olvidar, pero tarde que hará mella en la carrera de Daniel Luque. En domingo de resurrección, crucifixión en Madrid.
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