Si el
pliego de Las Ventas, del que hablábamos ayer, es cuestión crucial para el
futuro de la tauromaquia, la segunda cruzada, que hoy comentamos va estrechamente
relacionada. Tal y como está cociendo en la Unión de Toreros “g”, pretenden
cambiar el modelo de negociación con las televisiones y en lugar de que sea la
televisión y el empresario de la plaza, los que lleguen a un acuerdo para
televisar una determinada corrida o una feria entera, como ahora ocurre,
quieren que la televisión negocie directamente con ellos por sus derechos de
imagen. Incluso se rumoreó que la Unión de toreros cedería a una empresa sus
derechos para que esta fuera la encargada de negociar con la televisión, cosa
que desmintieron pero no rotundamente, con lo que hace sospechar que hay algo detrás
de la mata.
Apañados
vamos, no está la tauromaquia para este tipo de experimentos. No hay
competencia, ya que ninguna televisión está dispuesta a dar toros y si esto se
llevará a cabo, asustarían al único ente que ha puesto su confianza y su dinero
en dar toros. Si o si, los “g” están condenados a un acuerdo con Canal +. Si no
hay acuerdo la tauromaquia quedaría muy perjudicada, ya que la difusión de las
grandes ferias seria nula, los triunfos quedarían cegados y no habría semilla
para crear afición. No se me ocurre ningún deporte de primera línea que no
tenga difusión por televisión. Se imaginan unos juegos Olímpicos sin tele, o un
Mundial de fútbol, yo tampoco me puedo imaginar un San Isidro sin tele, ni el
próximo empresario tampoco, por el bien de sus cuentas.
Ya que
viene al caso recordar que con sus exigencias económicas los toreros se
cargaron los toros en TVE. Tenemos la idea equivoca de que fue el ente el que
se cargó la difusión de corridas de toros, pero, ¿que hicieron los “g” para
salvar los toros en la tele pública? , Nada. Al revés, pedían y pedían y en
lugar de ceder, por eso de crear una ventana a la difusión, no sólo por los que
están, sino para el futuro que viene detrás, prefirieron engordar la cartilla. Lógicamente,
TVE se cansó y si se le pregunta por qué ya no dan corridas de toros, la
respuesta la tienen muy clara, “Es un espectáculo caro”. Ahora, con la misma táctica
también van a cansar a las ya de por si maltrechas económicamente, televisiones
autonómicas.
Ahora,
un país taurino, Francia, exige recortes a los desorbitados caches de los
toreros “g”. Cosa que los “g” no están dispuestos a llevar a cabo. Francia no tenía
que quedarse al margen en una cruzada. Será el tema de la tercera cruzada del
toreo.
Por
Fran Pérez
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