Cuando
nos parecía haberlo visto todo, hoy en twitter se abrió la veda. Un apoderado,
que hoy se ha retratado como ejemplo de la mafia taurina que abunda en este mundo,
tan bonito y a la vez tan rematadamente injusto, ha empezado a sacar trapos
sucios, a orear mierda de un torero que acaba de remontar su carrera. Que no se
ha esperado ni a que le den el sitio que se merece por sus buenas actuaciones
en Madrid. Ha visto que la puerta medio se abría y se ha lanzado cómo un león a
por su trozo de carne. Qué bonita es la tauromaquia, pero señores, que asco da
con estas cosas. O se saca el silic bang y se empieza a quitar esta grasa, o
vamos a tener que darle la razón al viejo Choperita con lo de que “nos queda
muy poquito”. Y darle la razón sería una
estocada en el hoyo de las agujas a mi afición.
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