Esta
siendo un invierno desperdiciado. En lugar de estar buscando una solución para los
problemas acuciantes por los que pasa la tauromaquia y dotarla de un futuro
cierto, el sector se ha estancado en un tema menor como los derechos de imagen
del grupo unido de figuras y autoproclamados.
El
enemigo sigue dando pasos de gigante y el sector sigue a verlas venir. Parece
que el mazazo de Barcelona no ha sido suficiente y quieren seguir probando las
lindezas con las que Anselmi y sus secuaces quieren acabar con el pan que les
da de comer. A Galicia ya la han tocado, Quito esta descabezada y Colombia ya
va remojando la barba.
Pero
si nos pensamos que estos son los únicos enemigos vamos listos. Dentro del
sector están los peores. Siguen populando por la fiesta, personajillos que no
pagan sus deudas, señoritos del pagaré, trabajadores de la navaja, tuneleros e
hijos de puta que se aprovechan de la ilusión de un chaval que quiere ser
torero.
Miro
la feria que se ha presentado en Ajalvir y me desespero. Pero cuánto
sinvergüenza anda suelto. Como puede valer un festival, lo mismo que una
corrida de toros. Todos sabemos que la corrida de toros, en este caso, sólo se
diferencia del festival porque los actuantes irán vestidos de otra manera.
Desgraciadamente, el toro, que es el que debe de marcar la diferencia, será el
mismo. Tampoco entiendo como un torero al que termine respetando, y mira que me
costó, ha terminado toreando estos festivales, donde Cristo perdió el gorro. Lo
peor de todo, es que no es el único. Seguro que gana más toreando el festival
que Esaú Fernández la corrida de toros……. ¿Y de verdad el problema esta en los
derechos de imagen?
2 comentarios:
Fran:
Si señor, se puede decir mas alto pero no mas claro.
Un saludo
No. El problema está en otro sitio. Me encanta tu blog, btw.
Publicar un comentario