Parece que la
prensa especializada de Murcia no le va a decir nada a Ángel Bernal. La pasada
semana, los empresarios de ANOET (Asociación nacional de organizadores de espectáculos
taurinos) salían a dar lastima y decir que estaban en quiebra.
Ya se saben la
historia, tanto han exprimido el limón, que ahora ven que no sale ni gota. El
caso es que hay que empezar otro, nuevas ideas, trabajo y más trabajo, pero en
lugar de coger camino a la frutería, se han puesto a pedir por la calle.
Entre los
empresarios, el murciano Ángel Bernal. "La plaza de Murcia es privada.
Llevo cuatro años perdiendo dinero a pesar de haber reducido en este tiempo el
número de espectáculos de once a cuatro", declaró.
Está claro que
la propiedad de la plaza de Murcia es privada, lo que no dijo Angelito es que
el propietario también es él y que eso no se ve reflejado en el precio de las
entradas.
Las entradas
para ir a los toros en Murcia son prohibitivas. En pleno septiembre, entre
feria y vuelta al cole, estudios y universidad, al murciano le cuesta un huevo
pagar 18 € al sol. Y eso este año, porque anteriormente vació el tendido de sol
con entradas a 30€ y toro impropio. Pero lo que pierde en el sol la empresa, lo
quería sacar en la sombra. Se irán los pobres pero vamos a asfixiar a los que
quedan. Y si en el sol 18 euros no los paga nadie, en la sombra 60 por un
tendido alto, ni dios que baje del cielo.
Y entre las
entradas caras y la sensación de engaño y charlotada que se ha ido llevando la
gente en La Condomina, es normal que los llenos aparentes de antes se hayan
convertido en los tercios escasos de ahora.
Que vale que el
público de Murcia sea más de pastelico de carne y bota de vino, pero de ahí a
tontos ahí un rato. El murciano quiere la merienda, esas viandas tan ricas de
mi tierra murciana, pero también quiere ver en el ruedo algo equilibrado al
precio que paga en taquilla. Porque si no pasa lo de ahora, que el pastelico de
carne y la botica de vino se lo toman en la subida de la Fuensantica.
Y la publicidad
es otra cosa. Angelito se cree que pegando carteles y anunciando la feria con
un vídeo en el programa rancio de toros de una televisión murciana y dando de
comer a estómagos agradecidos para que le hablen bien de la feria va a conseguir
llenar los tendidos. Que equivocado esta. Y este año, salvo el vídeo de Bayona
y Ríos, que daba lugar a la esperanza, fue más de lo mismo, por mucha ruta de
la tapa que se inventara. Fuera del núcleo de la ciudad, nadie sabía que había
toros.
Caro, light y
sin publicitar. ¿Cae usted ahora que no sólo la crisis es la culpable de pasar
de 11 festejos a cuatro en Murcia?
A lo mejor
señor Bernal es que se le han acabado las ideas. A lo mejor es el momento de
dejar la plaza a alguien que si tenga confianza y ganas de trabajar de verdad.
Y candidatos le sobrarían para ello. Es el momento de volver a sembrar y no de
cargarse la feria a dos espectáculos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario